lunes, 16 de agosto de 2010

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la razón de la existencia del ser humano es la búsqueda de un sentido esencial de vida, algo por que vivir, anhelar, sentir, reír, llorar, todo tan complejo como tratar de comprender la metafísica, casi tan complejo como creer en algo. Planteo personalmente la misantropía no como un movimiento apático, mas bien integrador sin interés, cambiar el chip de millones de inconcientes no es fácil, tratar de que millones de imbesiles piensen un momento en el mañana es mas complejo que sentarnos a debatir sobre los términos tan manoseados en este nuevo siglo, incrementando la imbecilidad del nihilismo, la inconciencia del idealismo (mas antiguo), el casi pesimismo del realismo, la individualidad del misántropo. Todo me huele a poco interés en que es lo que queremos, el ser humano se convierte poco a poco en autómatas, robots programados para hacer algo, por ahí Marx decía enajenación, Durkheim habla de división del trabajo, yo digo que ellos tienen razón hasta que su teoría se entremezcla con la teoría sistémica. No somos robots, no todos somos iguales, no todos queremos lo mismo. Creo en la individualidad del ser humano, pero no podemos renegar que solos no estamos, como misántropo debo decir que me preocupa lo que le pasa al imbesil de al lado Mio, no es tan difícil recapacitar y romper un paradigma, los estilos de vida de hoy me dan asco, tu me das asco, yo me doy asco. Replantea tu imbecilidad y trata de no molestar al de al lado, no incomodarlo, que llegara el día en que podamos vivir en libertad, en naciones libertarias (no anarquistas) donde la única forma de regularnos será nuestra razón y nuestra conciencia en cuanto al otro. De nuevo explico que la misantropía aparte de entregar odio, debe entregar fuerza para cambiar la conciencia de los estupidos autómatas, de los imbesiles, que no somos retrasados mentales, que no somos estupidos, es solo que odiamos a la humanidad por como ha estado manejando la vida, tu vida, mi vida.

O es solo que desperte de mal humor.